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Gran incendio en el "SAM Automotive" en Bohmenkirch

Categoría: Equipo Nacional de Cuerpo de Bomberos del Año

Cuerpo de bomberos: Freiwillige Feuerwehr Böhmenkirch (Baden-Wurtemberg)

Operación: Gran incendio en el "SAM Automotive" en Bohmenkirch

El sábado 10 de marzo de 2018, poco después de las 15:00, un incendio en el área galvánica de la empresa de Böhmenkirch "SAM Automotive" desencadenó una operación de rescate a gran escala con unos 220 efectivos de rescate. El cuerpo de bomberos de Böhmenkirch junto a los cuerpos de bomberos de Bartholoma, Geislingen y Eislingen, así como el conjunto del parque automovilístico de bomberos de Salach, desplegaron un total de 26 vehículos de emergencia en Heidhöfe. Otros 13 vehículos del servicio de rescate junto a 26 empleados prestaron apoyo durante el gran incendio.

Según el jefe de bomberos local, Michael Reick, la lucha contra el fuego resultó ser un enorme desafío, ya que grandes partes de la planta de anodizado (más de 200 m2) ya estaban en llamas a la llegada de los efectivos de rescate. Inicialmente, la principal misión consistía en combatir el fuego en el Pabellón 1 SAM y en evitar que el fuego se extendiera a las naves vecinas. Allí se almacenaban cantidades considerables de líquidos inflamables, incluyendo ácido altamente concentrado y lejía, en varios depósitos de hasta 20 metros cúbicos. A pesar del rápido despliegue de los bomberos, el fuego se extendió rápidamente. Las llamas llegaron al techo y, en consecuencia, este fue pasto de las llamas y se derrumbó en un área de más de 500 m2. Esto podía provocar que otras partes del edificio corríeran un grave riesgo de derrumbarse.

En aquel momento no se sabía a ciencia cierta si el incendio superaría el perímetro del cortafuegos llevado a cabo o si toda la superficie de 6.400 m2 sería finalmente víctima del fuego. Después de sopesar los peligros potenciales, se tomó la decisión de un nuevo ataque al fuego desde dentro.Dos autoescaleras asumieron el trabajo de extinción desde arriba. El techo restante, que corría peligro de derrumbarse, la expulsión intermitente de grandes cantidades de sustancias peligrosas y el agua de extinción mezclada con lejía y ácido, que llegaban al patio de las instalaciones de la empresa, obligaron a los servicios de emergencia a retirarse una y otra vez y a reestructurar los trabajos de extinción. Reick habla, por tanto, de un despliegue "muy dinámico".

Gracias al valiente procedimiento de los efectivos que participaron en la extinción, el fuego se pudo mantener en el área de la planta de anodizado dentro de la nave "Halle 1 SAM" y se evitó una propagación mayor. Las paredes circundantes de la planta de anodizado no eran aptas para la protección contra incendios, pero afortunadamente sólo tenían unas pocas zonas sin protección. Allí los bomberos pudieron prevenir eficazmente la propagación del fuego en un ataque al fuego desde dentro. Casi tres horas después del inicio de la actuación de los bomberos, se informó de que la situación tenía el estatus de "fuego bajo control".

Según los conocimientos actuales, en la zona de la planta de anodizado había un total de casi 400 m3 de sustancias peligrosas mezcladas, compuestas de ácidos, alcalinos y agua. Además, se utilizó una cantidad de agua para la extinción de aproximadamente 280 a 300 m3. Durante la operación, toda la mezcla llego al sótano del edificio, a los depósitos en el área exterior, a la zona incendiada, al sistema de alcantarillado y a otras áreas desconocidas. Gracias al cierre a tiempo de la estación de bombeo y a la aspiración de los productos químicos expulsados en varios puntos, se pudo evitar una propagación significativa de las sustancias peligrosas y, por lo tanto, un gran impacto medioambiental.

Incluso tres horas después del inicio del incendio, la extinción completa del fuego en zonas más aisladas no fue posible debido a la compleja situación y al peligro de derrumbe. Posteriormente, los incendios menores fueron extinguidos con éxito una y otra vez por las autoescaleras.

Poco después de las 20.00, los primeros bomberos y sus grupos de trabajo se separaron y abandonaron el lugar del incendio. A las 22:12, se informó de la extinción total del incendio con las palabras "Incendio extinguido". Los bomberos de Bohmenkirch y de sus alrededores hicieron la siguiente guardia.

El domingo 11.03.2018 comenzaron los trabajos de limpieza. Debido a las sustancias peligrosas aún presentes en el edificio, que a su vez no podían ser eliminadas/drenadas, no se pudo entrar en la zona calcinada por razones estáticas. La zona de peligro, que corría el riesgo de derrumbarse, se cerró y se prohibió el acceso a la zona afectada. En ese momento quedaban todavía unos 200 m3 de sustancias peligrosas en la planta baja y otros 120 m3 en el sótano.

Por consiguiente, se encomendó al cuerpo de bomberos de Bohmenkirch la tarea de que la zona del sótano, que no corría riesgo de derrumbarse, sino de tener fugas, fuera aspirada/drenada por camiones bomba y, por consiguiente, descontaminada.

Después de que los representantes de la Agencia de Medio Ambiente aclararan la situación y de que se hubiera suministrado suficiente cal para descontaminar el agua de la extinción, se decidió tratar y descontaminar adicionalmente con más cal el agua de extinción que se encontraba en el canal hacia los depósitos de retención y en los depósitos exteriores. Con las tres bombas sumergibles del cuerpo de bomberos de Bohmenkirch el sótano fue drenado y los líquidos (pH 1-2) fueron conducidos en la mezcla de cal para su descontaminación en un depósito adyacente en el área exterior. Después de drenar el sótano desde 2 a 4 cm y, tras acordarlo con la Agencia de Medio Ambiente, las actuaciones se suspendieron.

Alrededor de las 19:49 el departamento de bomberos de Bohmenkirch también pudo anunciar el fin de la operación.